Borrachera con malandros...y al bote!!
Aquella noche con los cuates se suponia seria como una mas de las tantas pedas que acostumbrabamos a tener como medio de convivio juvenil. Uno de mis cuates –Gualberto (que nombre mas pinche, siempre se lo dije y nunca lo nego)- paso a recojerme para proceder y dirijirnos a recojer a 2 amigos mas: Victor y Chuy. Aquella noche en realidad no teniamos ningun plan de que o a donde nos dirijiriamos. Creo que despues del tipico –“a donde weyes?”, “a donde caiga”- y sabiendo que en esos tiempos en La Laguna (a partir de este momento en este escrito sera referida como LaLaTown) no habia muchas cosas por hacer para un grupo de 4 jovenzuelos preparatorianos.
Llegamos a casa de Chuy y, al tener este en su casa instalada una tiendita miscelanea, decidimos quedarnos y darle baje con churritos chavita empapados de salsa valentina, una autentica delicia. Despues de 2 horas degustando estas delicias alguien tuvo la grandiosa idea de ir a la cantina del barrio, cantina tipica de trabajadores de “cuello azul” en donde nosotros eramos los mas jovenes entre un grupo de cuarentones y mas veteranos en el arte embriagadora de consumir alcohol.
Recuerdo vagamente que se “acoplaron” a nuestra mesa un grupito de cholos –que eran bastante buena onda para ser malandros-. Duramos un instante aventandonos unas frias entre su compañia y riendo por cualquier tonteria: -“Wacha a aquel ruco, “ese”, me lo tope en el baño y le mio los pies al bato que estaba en el mingitorio a un lado”-...y mas platicas profundas por el estilo que acompañamos con sabrosos tequilas con limon.
Despues de seguir cultivandonos en el arte del albur y la peladez, un cholito tuvo la gradiosa idea de seguir nuestra “fiesta” en otro tugurio de mala muerte: La famosa Borrega. Yo habia ya escuchado hablar de esa famosa zona roja que para ser honesto nunca fui ni me dieron ganas de conocerla. Yo era mas un chavo en la onda de “grupos religiosos” o de “Boy Scouts”...ah! Que buen muchachito era yo. Bueno, prosigiendo...sniff, sniff.
Como buenos borregos: “Borrega, here we go!!!” y que nos trepamos a la “van” de los cholos (oh Dios que error, si lo hubieramos sabido). Llegamos a tal lugar que cuando lo ví mis ojos castos dudaron aun que algo tan feo pudiera existir. Un monton de gente “diferente” a nosotros bailaban con cadencia en esa decadencia. Mujeres algo mayores esperaban que alguien las sacara a bailar...por la modica suma de $15 pesitos. Despues de haber analizado a los asistentes por lo mismo que dura una cheve, me di cuenta que yo quizas era de los mas chicos en aquel ambiente estilo “ruco’s night”.
Sali a fumar un cigarro (como buen joven rebelde) y un poco despues de mi, aquel foco rojo sombreo una figura que pude apreciar a un lado mio. Era uno de mis nuevos “amigos cholos”. -Que lindas son las nuevas amistades!- Pense.
-“Que rollo, ese”- trate de poner en practica mi nuevo lingo recien aprendido. –“Ta’ chido el cotorreo, no?”- pregunte.
-Saca la lana.- Respondio con tono autoritario. Le dije que no era mucho lo que traia, que podia “lanzarle” una birria (no de comer si no de tomar) si el queria... (aun dudando lo que me habia preguntado, sin imaginar aun que era mas un asalto).
–“Que onda loco, que no somos amigos? Que ya se te olvido lo bien que la pasamos en la “Ele”?- pregunte con valentia y tambien con un nudo en la garganta, y que saca un pinche fierrote (navaja) el wey. A Diosito Santo, que aprieto mandibula y me armo de valor: -“Mira alla quien viene”- le dije al cholito tratando de disimularlo pensando que mi metodo de distraccion de primaria aun me serviria...y en chinga a correr! Creo que estuve a punto de igualar el record de Usain Bolt en los 100 metros planos. Corri, corri por distancia interminable, oi los gritos del Chuy diciendome que no me detuviera pues tambien a el habian querido asaltarlo y detras de el tambien venia otro de los cholos desgraciados amenazandolo con una pistola. Corrimos por mucho tiempo, que se hizo eterno ayudado por la mala condicion que da el cigarro. Creo que huimos de ese lugar aproximadamente a las 1:00 de la madrugada, recuerdo cuando nos reunimos, Chuy y Victor...y Gualberto? Todos preguntamos “donde esta este wey?”, con mucha preocupacion pensando lo peor, lo habrian picado (herir con navaja), lo habrian...matado?? “Noo!!” repondimos todos al unisono.
-“Vamos a regresarnos a buscarlo”- alguien dijo y los demas lo acordamos y pues de regreso a la boca del lobo a la busqueda de Gualberto. No habiamos caminado ni 15 cuando una tenue sombra se reflejo en el pavimento: Era Gualberto ahogado de borracho.
Bonito panorama, un wey pedo, 3 mas sin dinero y muchos kilometros por recorrer para regresar a casa. Arribamos a la ciudad alrededor de la 4. Sedientos, hambrientos, temerosos y con muchas ganas de miar. Decidimos “escondernos” a tirar el agua en la plaza principal, para ser mas exactos: cerca de los arbustos..a un ladito del kiosco...el escondite secreto, sin duda.
-“Hey, que estan haciendo ahi, ustedes”- Alguien nos grito interrumpiendo una miada de 2 minutos. Pudimos distinguir a un guardian de la ley.
-“Nada oficial, aqui tirando el agua”- fue nuestra respuesta seguida de carcajadas...y bueno, por andar de burlones y sin dinero no tuvimos otra opcion que ser llevados a la ergastula municipal mejor concida como “Bote”.
Aquella era mi primera vez que pasaria en la carcel. Asustado di mis pertenecias, cartera, reloj, chicles clorets, monito de ET, etc. y nos metieron en esa jaula llena de borrachos y demas. Un olor nauseabundo se percibia en aquel lugar en el que la taza del baño se encontraba en una esquina y alguien estaba en ella, defecando, a la vista de todos. No pude soportar el ver eso, sin reirme al igual de hacer una muestra de asco. Gualberto aun briago opto por quedarse dormido, con la boca abierta, y Victor y yo al verlo temblando por el frio le tapamos...con una cobija que esta tirada en esa sucia celda. Olia a rayos y, entre risas, la tomamos con la punta de los dedos y lo tapamos con esta...Chuy encontro un popote el cual tomo y lo introdujo en la boca abierta de Gualberto el cual cada vez que respiraba movia el popote de arriba abajo causando la risa colectiva de la comunidad delincuente.
Vimos como arribo a la celda un nuevo miembro que segun nos conto: “su Mama le habia hablado a la “polecia” por andar de ebrio y escandaloso, y agrego sin verguenza alguna: “pos yo creo que me voy a aventar un mes encerrado por otra cosa que ya debo...nah! esta bien, sirve que me pongo mas chonchote”...Platicamos con muchos de los “presos” los cuales nos veian como bichos raros:
-“Usteden han de ser del Campestre veda’?- Nos preguntaban dejandose llevar por el look clasemediero de las camisas “Boy London”.
-“No carnal, somos de aqui nomas...del centro.”
Como a las 12 del dia acabo mi aventura loca, en donde por andar de “Socialité” con la comunidad malandril ya casi no la contaba...A pero que divertida fue esa noche en el botellon. Claro, despues de haber sido bien sermoneado por mi santa Madre.
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